La figura de Kapuscinski es un referente para los alumnos de periodismo

PRKAPU01 29.05.11 /Sonia Moraleda

Dos jornadas han sido suficientes para llevar a cabo el III Seminario Internacional Ryszad Kapuscinski. Los días 4 y 6 de mayo fueron los elegidos para que numerosas personalidades del mundo del periodismo y conocedores de la figura del polaco Ryszard Kapuscinski se reunieran en la Universidad Miguel Hernández y compartieran sus conocimientos con los alumnos de la Licenciatura de Periodismo. Un total de ocho ponentes llegados desde distintos puntos de la geografía española y polaca  se convirtieron en los protagonistas del seminario.

 Con una asistencia bastante notable de público, la impresión general de los alumnos allí presentes era de curiosidad y ganas por saber lo que ocurriría dentro de esas cuatro paredes. Palabras, citas, historias y anécdotas son algunos de los aspectos que más se valoraron y, visto lo visto, lo que más agradó a los futuros periodistas que participaron en las jornadas. Francisco Esteve, Arkadiusz Lewiki, Amelia Serraller, Beata Nowaka, Malgorzata Kolankowska y Jedzrej Morawiecki fueron algunos de los ponentes que más se centraron en definir y explicar la figura de Kapuscinski, por el contrario, Olga Rodríguez y Ramón Lobo prefirieron ceñirse a la realidad y al mundo periodístico.

Con una cita de Oscar Wile: “Es mejor que se hable mal de uno a que no se hable”, comienza su ponencia Amelia Serraller (investigadora y traductora). Su objetivo, explicar las controversias existentes entre las dos únicas biografías publicadas de Kapuscinski. Para ello, no duda en resaltar algunos aspectos que han caracterizado al autor polaco a lo largo de su vida, por ejemplo, que su primer gran hito fue la publicación en 1955 de su columna “Esto también es verdad sobre Nebojuta”. Por otro lado, añade que existen obras inéditas dedicadas exclusivamente a África, país donde estuvo destinado nuestro protagonista, que fue testigo de seis Golpes de Estado y que el mundo político es otro de los aspectos que tampoco se le resiste.

Además, a destacar fue la ponencia de Francisco Esteve (Director de la Cátedra Miguel Hernández) que se centró en explicar el paralelismo existente entre la figura de Miguel Hernández y la de Kapuscinski. Sus orígenes, experiencias y algunos hechos que marcaron la vida, infancia y juventud de ambos escritores son sólo algunas de los aspectos que guardan en común estos personajes. Además, tanto Miguel como Kapuscinski comenzaron en los medios de comunicación su trayectoria profesional, y si hay algo a lo que ambos le dan importancia es al concepto de compromiso, palabra que tuvieron muy presente y que llevaron a cabo hasta sus últimos días.

Por otro lado, la figura de Kapuscinski guarda una estrecha relación con el reportaje literario, y eso precisamente, fue en lo que Jedzrej Morawiecki (reportero y profesor de la Universidad de Wroclaw) centró parte del seminario. De reportaje literario se puede clasificar el libro de “Cristo con un fusil al hombro”, por lo que nuestro ponente cuenta que a lo largo de esas páginas, cada vez más, se verá expresado el ego del protagonista, y añade de Kapuscinski es un buen ejemplo de la explotación de símbolos con los que se ayuda para explicar la realidad. También cuenta que el reportaje literario se merece y ha de tener un lugar en la estantería de una librería, así como una frase que tenga potencial comercial, que al fin de al cabo es lo que importa.

Y una vez repasadas las hazañas de Kapuscinski, toca valorar la realidad de la mano de Olga Rodríguez y Ramón Lobo, ambos periodistas de profesión y sumergidos por completo en este mundo dedicado a las letras y a los hechos que acontecen a diario.

“Realidad y estereotipos” es el nombre con el que Olga Rodríguez presenta su ponencia, una ponencia dedicada a la vida real, al trabajo, al periodismo y a compartir con todos nosotros experiencias sobre Irak, país al que está muy unida. Como muchos de nosotros pensamos, los estereotipos se han llegado a convertir en unos de los problemas más grandes que conciernen a la información y a la manera en que percibimos la realidad, por ello, Olga no duda en afirmar: “El tiempo es fundamental para no caer en los estereotipos”. Multitud de hechos y noticias giran en torno a ellos, y eso es algo que debemos solucionar para poder lograr que la población conozca verdaderamente lo que sucede a su alrededor. Como todos sabemos y, sobre todo en esta profesión, existe una gran obsesión por la audiencia y por los beneficios económicos, cosa que no debe ser así, ya que la información siempre ha de ser veraz, correcta y transmitida, puesto que, como comenta la ponente: “La información es uno de los pilares básicos de las sociedades civiles y democráticas”.

Todavía existen periodistas volcados en su profesión que luchan por y para informar, por este motivo, muchos de los que logran conseguir grandes sueldos deciden marcharse con el propósito de luchar y logar un periodismo independiente. Y una cita de Olga Rodríguez que define muy bien lo expuesto anteriormente es: “Periodismo no es fichar a la entrada y salida de las empresas”, y afirma que esta es una de las muchas causas que ha hecho que Kapucinski se haya convertido en un referente en este mundo.

Por otro lado, Ramón Lobo hace especial hincapié en la prensa escrita y en la supuesta “crisis” por la que está pasando el medio impreso.  Asegura que aquellos que anuncian la muerte del papel deberían callarse porque, según él, sigue siendo el medio estrella, y para ello, no duda en aportar datos. Además, también lanza una fecha a favor de aquellos que continúan consumiendo prensa escrita, y como comenta: “La gente que va a comprar un periódico está haciendo un acto de fe y merece un respeto”

No podemos pasara sin mencionar la que fue sin duda la anécdota de la jornada, y es que al finalizar la ponencia de Olga Rodríguez y Ramón Lobo, como es costumbre, se abre un turno de preguntas para que los futuros periodistas y demás interesados puedan aclarar sus dudas respecto a lo comentado. Pues bien, el tema del reciente asesinato de Bin Laden se convirtió en el protagonista, ya que ambos expertos aseguran que guardan una visión muy distinta de lo ocurrido. Esto llevó a un rifi-rafe entre los dos ponente, y nada más ofrecía uno su opinión, el otro le contestaba. Eso sí, siempre con mucho respeto y cada uno defendiendo lo suyo con la palabra, cosa de la que todos deberíamos tomar nota.